Hoy México tiene tres retos, el combate a la CORRUPCIÓN, POBREZA y la VIOLENCIA. Ligados entre sí, estos tres temas. Se ha desatado la violencia por la corrupción e impunidad en los órganos de justicia. Y la pobreza, por la falta de oportunidades. Generando el incremento en las filas de la delincuencia.
Hoy nuestra sociedad sufre de estos graves problemas, generados, ¡no hoy, ni ayer! Venimos arrastrando ya de hace algunos años esta problemática. Abonada por malos gobiernos que heredan, su ineptitud, pero más allá su trabajo inmerso en la corrupción. Sin castigo ejemplar a esos malos gobernantes, la sociedad imita esos modelos, a sabiendas de la impunidad. Si lo hace el presidente del país, el gobernador, el alcalde, el juez, el ministerio público, el policía, etc. ¡Porque yo no!, Lo mismo lo vemos con los criminales, hoy muchos de ellos ejemplo para las nuevas generaciones. Al igual que el político corrupto, sin castigo, el delincuente lo mismo. Esos valores relajados en la sociedad, instan a la misma (jóvenes), buscando una vida plácida, sin esfuerzo, holgada. Robando, secuestrando, sicarios, narcomenudistas, tratante de blancas, huachicoleros, etc, etc, etc.
Esto provoca que día con día, la violencia esté en aumento. Y no vemos alternativas de solución. Hoy las medidas de castigo a la delincuencia son laxas. La impunidad rifa ante este escenario dramático. Se habla de la puerta giratoria, la facilidad para librar la ley. Provocado esto por malos ciudadanos que son las autoridades judiciales, en los diferentes niveles. Una policía expuesta en la mayoría de los casos, sin capacidad de respuesta y rebasada por la delincuencia.
Hoy en México, desafortunadamente lo más sencillo es delinquir, desde el ámbito político o desde las calles. Aunado a todo esto los medios de comunicación que festejan y vuelven héroes a los delincuentes (series de capos). Los corridos de narcos, que existan a la sociedad, en fin, tenemos una feria de apuesta a la violencia. Apenas hace unos días en los festejos de Halloween, madres disfrazando a sus hijos de narcos, de sicarios. Lo he dicho………..somos una sociedad sin rumbo! José Luis Rodríguez Chávez
