En el asesinato de Eugenio Garza Sada, el 17 de septiembre de 1973, “no hay negros y blancos absolutos”. Se trata de un caso armado y conocido por el entonces gobierno de Luis Echeverría, para cobrar un favor y negociar con el empresario regio, afirmó Jorge Fernández Menéndez, autor del libro “Nadie supo Nada”.
“Quizás el aporte del libro es mostrar que nada es blanco y negro, Luis Echeverría tenía conocimiento de cómo se iba a realizar el secuestro, porque la célula estaba infiltrada por el gobierno federal”, expresó.
Fernández Menéndez, detalló que, en torno al caso, hay otros hechos que se mueven, porque Garza Sada estaba por comprar toda la cadena del Sol de México, en aquellos días, y lo hubiera convertido en el principal empresario de la comunicación en el país.
En entrevista con Pascal Beltrán del Río, para Imagen Radio, el escrito manifestó que, lo que se intentó de hacer, por parte del gobierno de Echeverría, fue permitir que se realizara el secuestro, con la idea de después resolverlo, liberar al empresario, y poder tener unas bases comunes, para otro tipo de negociación.
Al hablar de la reedición de su obra, basada en documentos del Archivo General de la Nación, y que se presentará este miércoles 29 de enero, en el Salón Tamayo, del Club de Industriales, en la Ciudad de México, el especialista en temas de seguridad y narcotráfico afirmó que la obra es la única que afirma que Jesús Piedra Ibarra, hermano de la actual titular de la CNDH, fue detenido por la desaparecida Dirección Federal de Seguridad, por su clara participación en la planeación del secuestro de Garza Sada.
En la presentación de la reedición de la obra participarán, el periodista Pascal Beltrán del Río, Ricardo Raphael, Federico Reyes Heroles y el autor.
