Hoy en día, hay muchos mitos sobre las dietas altas en proteínas y hasta cierto punto, parece muy fácil adoptar este tipo de alimentación; sin embargo, los expertos recomiendan considerar ciertos aspectos a la hora de elegir una dieta hiperproteica para que realmente consigas tus objetivos que en la mayoría de los casos, se busca generar músculo o mantenerlo, pero quizá este sea el primer mito que debemos dejar atrás.
¿Qué es una dieta alta en proteínas?
Se considera una dieta alta en proteínas cuando se realiza una ingesta mucho mayor de este nutriente de la cantidad recomendada. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) deberían de ser de 0,83 g/kg de peso/día para adultos sanos, aunque también hay que tomar en cuenta que el aporte de proteínas debe ser personalizado y adaptado al contexto de cada persona.
Por ejemplo, el requerimiento diario de una persona sedentaria es totalmente distinto a un adulto que realiza pesas o algún otro deporte; por ello, es importante antes de empezar cualquier tipo de dieta consultar a un especialista.
Mitos y realidades de las dietas altas en proteínas
Dañan los riñones
Hasta el día de hoy no hay un estudio que confirme dicha aseveración. De hecho, los expertos recomiendan esta dieta para prevenir problemas de tensión arterial alta, diabetes y algunas enfermedades que suelen ser la causa de problemas renales.
Ante esto, lo mejor es ir con un nutriólogo que determine cuál es la cantidad de proteína que debes consumir de acuerdo a tus necesidades, edad, actividad física, etc. Porque incluso, una dieta considerada hiperproteica para algunas personas, puede que no lo sea para ti. De hecho, si estás buscando bajar de peso hay proteínas que debes evitar para adelgazar.
Te hacen ganar músculo
Esto es falso, consumir demasiada proteína no es una garantía para aumentar la masa muscular, aunque es un gran recurso para que el músculo se regenere, sobre todo cuando hay un entrenamiento intenso. Sin embargo, una vez que el crecimiento ha cesado de forma natural o las ganancias se vuelven cada vez más complicadas, la proteína extra no promueve el crecimiento en sí de los músculos.
Aumentan la grasa corporal
Un estudio analizó a un grupo de personas que comieron 3,3 gramos de proteína por kilo de peso durante cuatro meses y lo comparó con cuando hicieron una dieta saludable y equilibrada con respecto a todos los nutrientes. ¿La realidad? Las personas en observación no ganaron grasa adicional bajo la dieta hiperproteica.
Lo más adecuado para estar sano es llevar una alimentación equilibrada que incluya frutas y verduras, y aprovechar los distintos tipos de proteínas naturales que podemos encontrar en la carne, huevo, semillas, etc.
Recuerda que antes de iniciar cualquier plan de alimentación, debes consultar a un especialista para que determine lo que REALMENTE necesita tu cuerpo, y si, por ejemplo, quieres ganar músculo o perder peso, te dirá exactamente qué comer para lograrlo. Nunca hagas un plan tu sola, ya que, de lo contrario, podrías afectar tu salud.