Para una bonita piel 3 exfoliantes corporales

Con estas recetas de exfoliantes corporales que puedes hacer con ingredientes de tu cocina, ¡le darás la bienvenida a una piel mucho más suave, uniforme y brillante!

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Existen muchas razones por las que deberías agregar exfoliantes corporales a tu rutina de belleza: remueven las células muertas, mejoran la circulación y oxigenación de la piel, reducen la apariencia de la celulitis, aportan una suavidad incomparable, potencian el resultado de las cremas que aplicas y claro, ¡dejan la tez ultra brillante!

Si quieres hacerlos de manera natural desde casa, lo más importante es elegir los ingredientes correctos para evitar lastimar tu piel y lograr el propósito que estás buscando. Así pues, si lo que deseas es obtener una piel luminosa, hoy te daremos tres recetas de exfoliantes corporales que serán tus mejores aliados para conseguirlo. ¡Toma nota de todo!

Exfoliante de miel y café

Dale la vuelta a la piel apagada y con hoyuelos de celulitis, con este exfoliante corporal súper efectivo y estimulante. Todo lo que necesitas hacer es mezclar 5 cucharadas de café soluble, 5 cucharadas de miel y una cucharada de aceite de rosa mosqueta. Una vez que obtengas una pasta (sin granos de café muy grandes), aplica sobre la piel limpia, con movimientos circulares muy suaves.

Exfoliante de almendras y aceites vegetales

Para que la piel del cuerpo esté súper suave y radiante todo el tiempo, aplica este mix de ingredientes naturales que son sumamente humectantes y antioxidantes: Agrega a la licuadora una taza de almendras y media taza de avena hasta que quede hecha polvito, aparta en un recipiente y mezcla con 3 cucharadas de aceite de coco y 2 cucharadas de aceite de almendras dulces.

Finalmente, aplica como cualquier otro exfoliante en las áreas que lo necesites.

Exfoliante de arroz y yogur

¿Quieres regresar al tono natural de tu piel? Este es uno de los mejores exfoliantes aclarantes, gracias a las propiedades blanqueadoras del arroz y al ácido láctico del yogur. Para elaborarlo, basta con añadir una taza de arroz blanco y limpio a la licuadora (hasta que queden granos muy finos) y mezclar las partículas resultantes con una taza de yogur natural sin azúcar.

Cuando esté listo, colocalo mediante movimientos ascendentes después de tu baño nocturno, enjuaga e hidrata muy bien.