Contundente, seguro de sí mismo, práctico, así logró la Selección Mexicana sellar su segundo triunfo en el Mundial de Rusia 2018, victoria que virtualmente lo coloca en los Octavos de Final, esperando aun lo que suceda entre Alemania y Suecia.
Con dos goles cerraron un marcador frente a Corea del Sur, que parece suficiente para avanzar a la siguiente ronda y llenar de ilusión a todo un país; los coreanos por momento dieron batalla, y solo así se hicieron presentes en el marcador, pero México fue mejor los 90 minutos y por eso pudo cerrar la victoria por 1-2.
El Tricolor se siente grande, se sabe grande, por eso ante su paso no tiene dudas para aplastar al rival que tiene enfrente; primero al Campeón del mundo: Alemania, después a Corea del Sur, un rival con el que se tenía presupuestada la victoria, y aunque dio batalla con un par de disparos que inquietaron a Guillermo Ochoa, solo pudo hacerse presente una vez en el marcador.
Con un gol de Carlos Vela en el primer tiempo, por la vía penalti, el conjunto azteca se armó de valor. Desde el minuto uno había dejado claro que tendría el control y manejaría el partido bajo sus deseos, pero el gol del Bombardero fue suficiente para dejar las cosas claras.
El juego siguió bajo la sintonía mexicana, los de Corea del Sur trataron de ponerse al tú por tú, y así llegó Chicharito para poner orden y ajustar 0-2 en el marcador.
Son hizo el gol de la honra, cuando el tiempo se extinguía, fue un gol para reflexionar, para corregir en el futuro, pero infructuoso para hacer daño en el resultado.
México camina seguro a lo que parecen los Octavos de Final, con seis puntos que virtualmente lo ponen en primer lugar de Grupo F ilusionan a toda una nación.
