Toxica desquiciada pone en jaque a su novio, y todo por la contraseña

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En un video que se hizo viral, aparece una pareja en un restaurante, en donde la mujer le exige a su novio que le dé la contraseña de acceso de su teléfono celular, sin embargo, este trata de mantener la calma y se niega a hacerlo.

Si de parejas tóxicas se habla, las relaciones podrían ser infinitas, y es que en redes sociales circula un video que ejemplifica a la perfección lo que no se debe hacer a esa persona a la que supuestamente se ama incondicionalmente.

En el video que se hizo viral, aparece una pareja sentados frente a una mesa en una cafetería o restaurante, mientras la mujer le exige a su novio que le dé la contraseña de acceso de su teléfono celular, sin embargo, este trata de mantener la calma y se niega a hacerlo.

En el clip, da a penas 30 segundos se aprecia que la cómo la mujer pierde lo estribos ante la negativa del hombre y desata su ira casi de inmediato.

La mujer más enfurecida que nunca le da un ultimátum: “Quítale la contraseña o te lo reviento”.

Pero el hombre no cede y aún con calma le dice que de ninguna manera le dará la contraseña porque “es su teléfono”, sin embargo, la mujer se lo arrebata y golpea el aparato contra la mesa en varias ocasiones.

Ya totalmente desesperada, ella comienza a gritar y al ver que definitivamente no obtendrá la contraseña para acceder al equipo, termina por frustrarse y con violencia la mujer estrella el teléfono contra el piso.

Como era de esperarse el video provocó todo tipo de reacciones en donde los internautas criticaron la actitud de esta mujer y a quien denominaron como “la tóxica”.

“¡Qué horror de tipa!”, “¿Y la Toxica?”, “Seguro ella nunca enseña su teléfono y sí quiere ver el de él”, “Siempre le digo a mis hijos: pendientes de las psicópatas, al primer indicio, vuelen como las águilas”, “Por eso dejó el otro celular en la casa y el que cargo no tiene contraseña”, fueron algunos de los comentarios.

El lugar donde fue grabado este bochornoso momento se desconoce hasta el momento, sin embargo, es muestra de lo que no se debe hacer en una relación.