Familiares y víctimas del tiroteo en un supermercado de Buffalo (Nueva York) presentarion una demanda en contra de varias empresas de redes sociales, fabricantes de chalecos antibalas y una tienda de armas por el ataque masivo que resultó en la muerte de 10 personas, la mayoría afroamericanos. El abogado de derechos civiles Ben Crump argumentó que estas empresas ayudaron al tirador a “preparar el arma” y que fueron “cómplices, incluso si no están dispuestas a admitirlo”.
La demanda fue presentada en nombre de los familiares de las personas que perdieron la vida durante el incidente ocurrido en mayo de 2022 en la ciudad de Buffalo. El tirador, Payton Gendron, fue condenado a cadena perpetua. En un acto de violencia racial, el supremacista blanco, condujo alrededor de 320 km (200 millas) hasta una comunidad mayoritariamente afroamericana en Buffalo y abrió fuego contra los compradores dentro del Tops Friendly Market.
Las víctimas fueron Ruth Whitfield, de 86 años; Roberto Drury, de 32 años; Aarón Salter, de 55 años; Heyward Patterson, de 67 años; Perla Young, de 77 años; Geraldine Talley, de 62 años; Celestina Chaney, de 65 años; Katherine Massey, de 72 años; Margus Morrison, de 52 años; y André Mackneil, de 53 años. El tirador publicó un manifiesto en línea y transmitió en vivo el ataque.
Tres personas fueron asesinadas a tiros en el estacionamiento, mientras que las otras siete fueron asesinadas dentro del supermercado, con otros tres resultando heridas. Todos, excepto uno, eran afroamericanos.
“Este es un paso más hacia la búsqueda de justicia”, afirmó Crump, quien anunció la demanda junto a los familiares de las víctimas en una iglesia de Buffalo el miércoles.
Entre las empresas mencionadas en la demanda se encuentran Vintage Firearms, la tienda de armas donde se adquirieron legalmente las armas; Twitch, la plataforma de transmisión en vivo utilizada por el atacante: Facebook, YouTube, Google y Amazon.
La mayoría de estas empresas no estuvo disponible de inmediato para hacer comentarios. El fabricante del rifle estilo AR-15 utilizado por el tirador, Remington, no se menciona en la demanda. La compañía recientemente se declaró en bancarrota y el co-asesor Terry Connors mencionó: “Creemos que si presentamos una demanda en su contra, solo retrasaría el proceso legal”.
El año pasado, Remington llegó a un acuerdo de 73 millones de dólares con las familias que perdieron a sus seres queridos en la masacre de la escuela primaria Sandy Hook en 2012. Ha habido un aumento de demandas en contra de los fabricantes de armas después de dicho acuerdo, mientras que estados como California y Nueva York han intentado responsabilizar a los fabricantes y distribuidores por los tiroteos.
En mayo, las familias de tres víctimas en Buffalo presentaron una demanda por homicidio culposo en contra de varias empresas de redes sociales.
