No hay nada para nadie

Los Felinos y La Pandilla empataron 1-1 en un partido intenso en el que cada equipo acabó con 10 jugadores en el campo

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La noche en San Nicolás de los Garza fue todo menos fría. Si bien el termómetro rondó los dos grados centígrados, la calidez del buen futbol y un ambiente excepcional en el estadio Universitario hicieron que las sensación térmica pasara a segundo plano. Rayados y Tigres empataron a un gol en el partido de ida de la primera final regiomontana de la historia, con un desempeño que dejó un grato sabor de boca.

Tigres saltó inspirado a la cancha con el gran apoyo que recibió desde la tribuna e incluso desde que se asomó por los alrededores del estadio. Su gente le preparó un recibimiento de postal que será recordado por mucho tiempo, entre bengalas, banderas gigantes, humo y toneladas de papel picado.

Pero Rayados no se espantó con el escenario. Intensidad, orden y cabeza fría para poner el juego a su favor. Nicolás Sánchez apaciguó los ánimos de una afición universitaria que gritaba y brincaba de forma sincronizada con un tanto que celebró de manera desquiciada. A los tres minutos, el central argentino rozó el balón en un tiro de esquina para mecer las redes. El portero Nahuel Guzmán hizo contacto con el esférico cuando ya había rebasado la línea de gol.

La respuesta del equipo local llegó a los 24 minutos de tiempo transcurrido, aunque con polémica. El árbitro Jorge Isaac Rojas abrió la discusión al señalar un penal por un ligero empujón por detrás de Rogelio Funes Mori a Enner Valencia. El delantero ecuatoriano no se tocó el corazón, tomó el balón y anotó a lo Panenka.

Los primeros cuarenta y cinco minutos se fueron como el agua, con un público que agradeció el buen espectáculo brindado. Los dos clubes  acabaron por demostrar por qué fueron primero y segundo  lugar de la tabla en el torneo regular, sin que ninguno pudiera imponer su supremacía.

El complemento no desmereció, aunque no hubo más goles. Los dos equipos jugaron de acuerdo al nivel de sus plantillas, lo que les dio oportunidades de sacar el triunfo. Dorlan Pabón no pudo anotar en la mejor opción de Rayados, mientras que Hugo González y un poste de Gignac impidieron el triunfo universitario. El cancerbero volvió a bajar la cortina, como lo ha hecho a lo largo de la liguilla, y el francés se quedó con el grito de gol atorado al ver cómo el balón se alejaba del arco tras pegar en una de sus bases.

Y al final, en una muestra de lo intenso que fue el partido, salieron expulsados Leonel Vangioni y Hugo Ayala. Hasta en eso igualaron. La serie está abierta. Se va a armar la carne asada el domingo para definir al campeón del Apertura 2017.