Daniel Iván Zamarrón Saldaña, director de la dependencia, indicó que los árboles que se encuentran en un proceso de crecimiento están en el invernadero, un espacio cerrado que los protege de las bajas temperaturas que se presentan en esta temporada.
“Toda la vegetación que estamos sembrando tienen la capacidad para soportar los climas extremos que se presentan en la ciudad, pudimos observar que todavía hace algunos días en el vivero había árboles con follaje verde, sin embargo, en cuanto bajó la temperatura las hojas se empezaron a poner amarillas y a caer, es cuando entran en su estado de adormecimiento”, comentó.
El funcionario recomendó a la ciudadanía utilizar las hojas para crear materia orgánica que permita devolver nutrientes a la tierra para el desarrollo del árbol.
“Invitamos a la gente a que esperen a que caiga el follaje de los árboles y en lugar de tirarlo a la basura, guarden todas esas hojas en bolsas, una vez que se sequen pueden esparcirlas en un parque donde haya vegetación, las pisan y quedan trituradas, lo que ayudará a que el suelo mejore en beneficio de las plantas”, explicó.