El viernes 13 de octubre de 1972 un avión de la Fuerza Aérea Uruguaya que transportaba a 5 tripulantes y 40 pasajeros se estrelló por un error de los pilotos, quienes creyeron que ya estaban cerca de su destino: Chile, en las montañas de Los Andes, matando así a la mayoría de sus pasajeros, excepto un grupo de jóvenes que formaban parte del equipo de rugby de una escuela en Montevideo.
Jóvenes de entre 18 y 27 años que aprendieron a sobrevivir durante 72 días en medio del frío, sin comida ni recursos hasta que fueron rescatados.
Esa es la historia de “La sociedad de la nieve”, la nueva película de Netflix que ha cautivado al público por su conmovedora e introspectiva historia, que da detalle de lo que los sobrevivientes enfrentaron por más de dos meses en el Valle de Las lágrimas, con detalles contados por los mismos supervivientes.
La cinta, dirigida por el director español Juan Antonio Bayona apareció en la lista preliminar de las nominadas al Oscar 2024 y también compitió en los pasados Globos de Oro, dejando claro que no sólo el público que la ha colocado en número uno de vistas en la plataforma streaming sintió interés, sino también la crítica especializada.
Si ya pudiste verla y quieres saber más, estos son 10 datos curiosos acerca de la historia y el rodaje.
- Numa no era parte del grupo
“No hay amor más grande que el que da la vida por los amigos”, se lee en el papel que el protagonista, Numa Turcatt, le da a sus compañeros rumbo al final de la historia y este hecho real fue más significativo porque según han asegurado todos los sobrevivientes, Turcatt fue un personaje fundamental durante la experiencia a pesar de que él no era miembro de la tripulación e incluso no formaba parte del equipo de rugby, no iba a la misma escuela, ni era familiar de ninguno de los otros jóvenes antes del vuelo, sino que decidió aceptar la invitación de sus amigos: Pancho Delgado y Gastón Costamalle. Sobrevivió al accidente totalmente ileso y fue uno de los líderes morales y físicos de la expedición.
- De mano de un compañero.
Pablo Vierci, el autor del libro homónimo en el que se basa esta película, fue en realidad uno de los compañeros de escuela de los sobrevivientes, quien años después reunió el testimonio de todos para su libro y es también productor asociado de la película. Además ayudó a los actores a lograr el realismo en la forma de hablar de un joven de su barrio en aquella época.
- Coche la vio
Cuando José Luis “Coche” Inciarte enteró al director de la película sobre que estaba padeciendo cáncer, Bayona le prometió que él sería el primero en ver la película, así que se la presentó antes que a nadie y fue de su agrado. Inciarte falleció poco después, el 27 de julio de 2023, en su natal Montevideo.
- Gran producción
La inversión para este proyecto fue de 66 millones de dólares, por lo que se ha convertido en el largometraje español más caro de la historia, superando a “Agora” (2009), que tuvo una inversión de 55 millones de dólares.
La mayor parte del rodaje se hizo en la alta montaña de la Sierra Nevada de España, pero también hubo tomas en Montevideo, Uruguay Chile y Argentina, incluso el lugar real del accidente: El valle de las lágrimas, el cual visitaron en la misma época del año en la que se produjo el accidente.
La idea de hacerla producción surgió a Bayona mientras estaba grabando su famoso filme “Lo imposible” y espero 10 años antes de que pudiera llevara a cabo con seis meses de casting en el que participaron más de mil actores de nacionalidad argentina y uruguaya. 7 semanas de ensayos y 141 días de rodaje de los que resultaron 600 horas de material, 100 de las cuales eran horas de entrevistas de sobrevivientes y familiares.
- Con sonido del Oscar
Michael Giacchino, el compositor de la banda sonora de la serie “Lost” y las películas “Up” y “Ratatouille” fue el encargado de realizar la música en esta película. Antes él ya ha ganado el Oscar, por “Up”, en 2010.
- Dieta rigurosa
Cómo la película se grabó en orden cronológico, los actores tuvieron una dieta extracta que les ayudó a bajar más de 20 kilos para dar realismo a lo que vivieron y las condiciones de desnutrición en las que fueron encontrados. Su ingesta durante los días de rodaje se limitó a fruta y una lata de atún al día, asesorados por nutricionistas. En total fueron cinco meses bajando de peso.
- Cameos reales
En más de una ocasión algunos de los sobrevivientes reales aparecen en la historia, comenzando por Carlos Paéz, el pasajero más pequeño de la tribulación, que en aquel entonces tenía solo 18 años, pero que en la actualidad aceptó interpretar a su propio padre, el pintor Carlos Paéz Vilaró, quien nunca perdió la esperanza de encontrar a su hijo y se le ve en una de las escenas más importantes, cuando a través de la radio nombra a todos los sobrevivientes, incluyendo su hijo.
Asimismo, el verdadero Nando Parrado, aparece en el aeropuerto abriéndole la puerta a su familia en la ficción. Esta escena es significativa pues sí madre y su hermana murieron en el accidente. Y Roberto Canessa,finalmente se convirtió en doctor y aparece recibiendo a su propio personaje a su rescate en el hospital.
Además, el locutor Thomas Friedman, quien dio al aire los nombres de los sobrevivientes volvió a grabar 50 años después la misma histórica escena.
- Nando Parrado estuvo cuatro días inconsciente después del accidente, sus compañeros pensaron que estaba muerto y pusieron su cuerpo contra la entrada del fuselaje, sin saber que su cabeza terminó reposando sobre el hielo y de esa forma se desinflamó su cabeza y lo ayudó a superar su fractura de craneo que después le provocó una hemorragia que filtró su sangre hacia el tejido blanco de la cara, por eso sus párpados estaban negros al comienzo de la cinta.
- Al final de la película vemos cómo Gustavo Zerbino se negó a regresar sin dejar una maleta, la razón es porque tenía ahí objetos de todos los fallecidos que entregó a sus familiares como recuerdos y aún conserva algunos objetos. Mientras que los cigarros que sí se terminaron en la experiencia duraron tanto porque Javier Methol trabajaba para una compañía de tabacos de su familia y su plan era llevar los cigarros para hacer negocios en Chile, donde en esa época había escacez de tabacos. Luego del accidente acordaron que cada uno recibía una caja de 20 cigarros cada dos días.
- A 21 kilómetros al este de donde ocurrió el accidente había un complejo de verano abandonado, conocido como Hotel Termas. Ahora sólo quedan sus ruinas, pero una de sus atracciones era la pila termal al aire libre con aguas sulfurosas que descendían del volcán Overo.