Todos nos sabemos la de estar en “las buenas y en las malas”, pero en Juárez solo conocemos “las peores”. Estos días nos tocó estar (como siempre) para respaldar al club de nuestra ciudad y ni siquiera tuvo que ver con fútbol… Y es que así tiene que ser cuando el club se convierte en lo que más quieres y pasa a ser como tu hermano, tu mejor amigo. Hay que respaldarlo siempre dentro y fuera de la cancha.
Y pasa que nos pasamos la vida quejándonos y pidiendo que al equipo vengan jugadores que sientan los colores y cuando llegan los que de verdad los sienten, son juzgados por el aficionado promedio que del fútbol solo comprende las palabras ‘gol’ y ‘ganar’. Pero nosotros no somos el aficionado promedio, por eso decimos “Gracias, Diego por haber dado la cara siempre y en cada oportunidad dejar todo en la cancha. No fuiste el mejor técnicamente y aun así sentías esa responsabilidad de correr hasta el último segundo, pero sobre todo, con una sonrisa que solo pueden tener las personas que de verdad disfrutan del juego”.
Gracias también a la banda que durante la vida de Diego hizo lo que se tiene que hacer con cada jugador: animarlo y alentarlo para que saque lo mejor de sí mismo en los partidos. Gracias a quienes se hicieron presente en los eventos de conmemoración del “Puma” y que acompañaron al equipo en un momento tan difícil. Y gracias a toda la banda que está pegando las imágenes del “Puma” para recordarlo en la historia del fútbol Juarense. Quienes gusten seguir pegando, se les invita a que lo hagan en diferentes lugares de la frontera.
Nos vemos el viernes desde las 3:00 PM en el estadio Benito Juárez para la previa. Hagamos del fútbol una fiesta.
