Ocho pasajeros que viajaban a bordo del Norwegian Cruise quedaron varados en la isla sin dinero ni medicamentos vitales después de que el barco zarpó del puerto sin ellos.
Momentos de angustia y terror vivió un grupo de turistas luego de que el crucero de origen noruego en el que realizaban un viaje de placer los dejara abandonados en una remota isla africana.
Se trata de un total de ocho pasajeros que viajaban a bordo del Norwegian Cruise, entre ellos una mujer embarazada y un anciano con una enfermedad cardíaca, quienes quedaron varados en la isla sin dinero ni medicamentos vitales después de que el barco zarpó del puerto sin ellos.
Jill y Jay Campbell, quienes viven en Carolina del Sur, aseguraron que están atrapados en la isla centroafricana de Santo Tomé con otros cuatro pasajeros estadounidenses y dos australianos después de que el capitán del barco supuestamente se negó a permitirles volver a abordar.
Medios estadounidenses replicaron información que ofreció un portavoz de la línea de cruceros, quien afirmó que los pasajeros se quedaron en la isla “solos o con un recorrido privado” y se perdieron el “tiempo completo a bordo”, es decir, no llegaron a tiempo y el barco tuvo que zarpar sin ellos.
“Los huéspedes son responsables de asegurarse de regresar al barco a la hora publicada, que se comunica ampliamente a través del intercomunicador del barco, en la comunicación diaria y se publica justo antes de salir del barco”, dijo el portavoz.
De acuerdo con los Campbell, hubo un problema en su recorrido por la isla, por lo que el guía se retrasó y no los llevó de regreso al barco a la hora acordada. Aunque el operador turístico se comunicó con el capitán del crucero para informarle que llegarían tarde, este decidió seguir con su itinerario y dejarlos a su suerte.
Sin embargo, los Campbell aseguran que cuando llegaron al puerto, el barco todavía estaba anclado y la Guardia Costera de la isla los llevó en un bote para regresar a bordo, pero el capitán se negó a dejarles subir a bordo.
Así, junto a un matrimonio de Delaware, un parapléjico y un anciano con una enfermedad cardíaca, quedaron varados en la isla sin ninguna de sus pertenencias, ni dinero, ni medicinas ni los documentos de viaje necesarios.
En tanto, el portavoz de Norwegian Cruise Lines señaló que “los huéspedes son responsables de los costos de viaje necesarios para regresar al barco en el siguiente puerto de escala disponible”, por lo que el grupo deberá volar a Gambia, en África occidental, para recibir al crucero en el puerto el domingo.
La empresa aseguró además que está en comunicación con los huéspedes y han estado trabajando con las autoridades locales para comprender los requisitos y las visas necesarias para que los viajeros puedan abordar el barco.
