Al menos 24 pasajeros enfermaron después de ingerir alimentos contaminados a bordo del vuelo 136 hacia Ámsterdam, que aterrizó poco después de las 3 am en el aeropuerto JFK.
La comida en un avión es parte integral de la experiencia de viaje para muchos pasajeros, y las aerolíneas continúan ajustando sus ofertas para satisfacer las expectativas de los clientes en términos de calidad, variedad y adecuación a las necesidades dietéticas individuales.
Sin embargo, en ocasiones comer a bordo de un avión puede traer graves consecuencias, tal como les ocurrió a los pasajeros de un vuelo de Delta Air Lines que tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia en Nueva York por comida en mal estado estaba plagada de moho negro, de acuerdo con pasajeros a quienes les sirvieron el repugnante festín.
Al menos 24 pasajeros enfermaron después de ingerir alimentos contaminados a bordo del vuelo 136 hacia Ámsterdam, que aterrizó poco después de las 3 am en el aeropuerto JFK, con las personas quejándose de fuertes dolores abdominales, diarrea y vómitos.
Al principio se informó que 70 personas estaban enfermas, pero los servicios médicos de urgencia solo atendieron a 24, quienes afortunadamente no tuvieron que ser hospitalizados y solo se trato de una infección intestinal.
Hasta el momento no se ha revelado cuál era la comida contaminada, pero Delta confirmó en un comunicado “los informes de que una parte del servicio de comidas a bordo de la Cabina Principal estaba en mal estado”.
En tanto, los 277 pasajeros del vuelo recibieron alojamiento en un hotel para pasar la noche y continuarán su viaje este miércoles, mientras que la aerolínea se disculpó por el percance.
“Este no es el servicio por el que Delta es conocida y pedimos disculpas sinceras a nuestros clientes por los inconvenientes y la demora en sus viajes”, expresó en un comunicado.