‘El juego del calamar’ 2 promete ser mucho mejor

El actor sudcoreano platicó pocos detalles de su regreso al violento show de Netflix y su experiencia en The Acolyte

0
48

Después de darse a conocer como nueva estrella del universo Star Wars, Lee Jung-Jae continuará el próximo 26 de diciembre su ascenso debido al estreno de la temporada 2 de El juego del calamar en Netflix. Viajamos hasta el Festival Internacional de Televisión de Monte Carlo para hablar con él.

¿Cuánto cambió tu carrera tras The Acolyte?

– En realidad, gracias a El juego del calamar viví la exposición de un éxito inmediato. Fue por eso que también me llamaron para la serie de Star Wars The Acolyte. Y por supuesto, ahora gracias a ésta se me dio la gran oportunidad de exponer también mi corta carrera a nivel internacional. Ahora espero que podamos volver a vernos de nuevo con otras series, como la segunda temporada de El juego del calamar.

¿Qué podemos saber sobre El juego del calamar 2?

Hoy en día todo está relacionado con acuerdos de confidencialidad y lamentablemente no puedo contar nada realmente. Pero el director de nos había dicho que no iba a haber nunca una segunda temporada cuando filmamos la primera. Pero después del rotundo éxito mundial era imposible no hacer la secuela. Cuando él escribió el nuevo escenario no pude creer que lo había hecho tan rápido. Leí el guion y puedo decirte que me sorprendió, porque es completamente diferente a la primera temporada. La historia es bastante profunda y hay muchos personajes nuevos, donde se puede ver la rivalidad y la competencia entre todos. La forma en que se expresan emocionalmente es increíble. Así que no creo que vaya a decepcionar a nadie y estoy seguro que la gente va a disfrutar mucho más la segunda temporada que la primera.

¿Por qué cree que los actores asiáticos que hasta ahora sólo eran conocidos en Asia finalmente están siendo reconocidos en Hollywood?

Creo que el contenido asiático es apreciado desde hace tiempo, aunque antes sólo era por el cine de Japón, Hong Kong y China. Supongo que todo tiene que ver con la exposición global de las redes sociales. En aquel entonces, sólo había un grupo de gente que admiraba el cine asiático, mientras que hoy la reacción es global gracias a internet ayudando a cruzar fronteras. Yo también creo que soy parte de esa moda y tengo suerte de ser beneficiado. Tengo que estar agradecido. En Corea todavía tenemos muchos más tesoros y secretos, incluso en el resto de Asia. Y espero que la gente pueda descubrirlos a todos, de la misma forma que en Corea se disfruta contenido europeo y de Estados Unidos.

¿Cuáles son las diferencias de producción entre Corea y Hollywood?

Pienso que la forma de filmar es exactamente igual, aunque en Corea no le prestamos tanta atención al segundo plano, no tenemos tanto contenido audiovisual del universo. Pero yo diría que Hollywood y Corea comparten bastantes temas parecidos en la forma que se filma dentro de un estudio aunque Star Wars obviamente es una excepción.

¿En qué sentido?

En el lado artístico, el vestuario o casi toda la utilería y los efectos especiales de CGI. Star Wars cuenta con una larga historia desde los años 70. Y la serie de The Acolyte siempre tuvo un desarrolló complementario. La mayor parte del desarrollo técnico se hizo año tras año. Esa es la gran diferencia.

Lee Jung-jae obviamente no habla una sola palabra de español, pero tampoco es perfecto su inglés, aunque él sea quien realmente habla en la serie The Acolyte de Star Wars. Y con la ayuda de una traductora que lo sigue a todos lados, Lee no tuvo reparos en responder cada una de nuestras preguntas en su lengua natal coreana, más allá de utilizar de vez en cuando el idioma universal que todos entendemos: la sonrisa. Como cuando le pedimos al entrar, que hiciera algún movimiento clásico del Jedi de Star Wars y abrió las dos manos como si tuviera un verdadero sable de luz, aunque invisible. En The Acolyte, Lee Jung-Jae aparece desde los 15 minutos del primer episodio como el gran protagonista, el Jedi Sol, el mejor amigo de la asesinada maestra Jedi que debe que encontrar a la asesina.

¿Te regalaron después del rodaje el sable de Star Wars?

(Riendo) No.

¿Ni siquiera uno de juguete?

Tampoco.

¿Qué tan difícil fue trabajar en un idioma diferente al tuyo por primera vez?

Fue realmente muy pero muy difícil, porque mi lengua está acostumbrada a hablar en coreano y mis músculos no están acostumbrados al inglés. Cada vez que tuve que pronunciar y articular mis dientes se quedaban en contacto con la parte de adentro de mi boca. Al principio fue una lucha, pero por poco tiempo. Tuve que aprender a pronunciar el inglés correctamente. Y fue tan difícil que al final del primer mes hasta me costaba tragar al comer. Pero después del primer mes, ya me había acostumbrado. Para cuándo fue el momento de filmar la serie, ya estaba en condiciones para trabajar. Puse muchísima dedicación en la preparación de mi personaje. Y me ayudó para el final del rodaje, porque tuve diálogos con entrenadores que además tenían muy buen sentido del humor. Fue divertido.

¿Supongo que habrás visto las superproducciones de Star Wars, antes de filmar The Acolyte?

Yo había visto Star Wars cuando estaba en la escuela y en aquel entonces había sido todo un gran shock, por la historia a gran escala. Todo me parecía impresionante y me volví un fan más. Llegué a ver la serie completa de Star Wars en video. Me impresionó siempre la forma en que desarrollaron la continuación de la historia.

¿Y al ver alguna de esas historias de Star Wars imaginaste ser parte de su universo?

No puedo decir que soñaba con ser parte de la historia de Star Wars , porque era algo que jamás pude haber hacer y cuando mi representante me dijo que había una posibilidad de participar en la serie me sorprendió por completo.

¿Cómo fue el proceso hasta que finalmente lo contrataron?

Primero tuvimos una reunión por Zoom con el director Leslye Headland, pero después que me contrataron me enteré que tenía que representar a Sol. Te imaginarás lo sorprendido que estaba. Me puse muy nervioso, porque la gente puede compararme fácilmente con cualquiera de las otras películas o series que se pueden ver de Star Wars. Pero yo quería verme todavía más real. Mi personaje de Jedi lo imaginaba como alguien mucho más que un ser humano, alguien con muchas más expresiones humanas, emociones humanas. Y cuando se lo dije a la directora, estuvo de acuerdo conmigo y compartimos el mismo punto de vista. Es por eso que el mayor desafío terminó siendo hasta qué punto podía llegar a lograr el nivel que yo quería mostrar con las expresiones humanas con mi nuevo personaje del Jedi.

¿Sintió en algún momento la presión de mantener el mismo nivel de éxito de Star Wars con The Acolyte?

Totalmente. Es por eso que me preparé tanto con los diálogos en inglés para expresarme correctamente y tuve un coordinador especial para las escenas de lucha. Sabía que había una gran expectativa al máximo nivel y tampoco quería decepcionar a nadie. Por supuesto que sentí la presión, pero para ser parte del buen cine, también estoy acostumbrado a enfrentar un nivel de presión adecuado al mismo nivel artístico y no siempre es algo malo.