“En cada Cruzada se requiere una mesnada”
Recuérdenlo.
Pero… ¿Qué diablos es una mesnada?
Más que nada, es el reclutamiento de tropas para ir a la Cruzada.
El rey convocaba a sus vasallos y caballeros, quienes a su vez traían a sus propios hombres.
Pero la MESNADA, era algo más que el reclutamiento militar.
Los preparativos de un rey para ir a la Cruzada eran extensos y complejos.
Era principalmente la recaudación de fondos, la estructura logística y la estrategia de campaña.
Los reyes y nobles a menudo vendían o hipotecaban propiedades para financiar la Cruzada.
Esto incluía la compra de equipo, provisiones y el pago de soldados.
Este grupo de soldados formaba la mesnada, que era una unidad orgánica del ejército.
Durante el lapso previo al viaje el equipo tenía que hacer su preparación logística.
Se organizaban rutas de viaje, se aseguraban suministros y se establecían acuerdos con otros territorios para el paso seguro de las tropas.
Obviamente se requería entrenamiento y equipamiento.
Los soldados necesitaban entrenamiento y equipo adecuado, incluyendo armas, armaduras y caballos.
En cuanto al tamaño de la mesnada, este podía variar considerablemente dependiendo del poder y recursos del rey.
Una mesnada típica podía estar compuesta por varios cientos de hombres, aunque en algunos casos, especialmente para reyes poderosos, podía llegar a varios miles.
Una de las mesnadas más poderosas y reconocidas en las cruzadas fue la de los Caballeros Templarios. Fundada en 1119, la Orden del Temple se convirtió en una de las órdenes militares más influyentes y temidas de la Edad Media.
Su propósito original era proteger a los peregrinos cristianos en su viaje a Jerusalén, pero rápidamente se expandieron para convertirse en una fuerza militar formidable.
Los Templarios eran conocidos por su disciplina, entrenamiento y equipamiento superior.
Su mesnada estaba compuesta por caballeros bien armados y entrenados, así como por soldados de apoyo y personal logístico.
En su apogeo, la orden contaba con miles de miembros y poseía vastas propiedades y recursos en toda Europa.
Otra mesnada notable fue la de los Caballeros Teutónicos, quienes también jugaron un papel crucial en las cruzadas, especialmente en las regiones del Báltico y Tierra Santa.
Al igual que los Templarios, los Teutónicos eran conocidos por su organización y eficacia militar.
Tengo fundadas razones para pensar que Cruz Pérez Cuéllar está en el proceso de estructuración de su MESNADA POR CHIHUAHUA.
Sólo un par de razonamientos
- Durante su primera gestión, creó un programa sistemático de pequeñas “cruzadas” repartidas a lo largo y ancho de Ciudad Caótica.
Cruzada por tu colonia, cruzada por tu salud, cruzada por tu escuela, etc. etc.
Al principio creí que era un ingenioso plan de mercadotecnia que conjugaba el apellido CRUZ, con una serie de acciones político/ sociales.
- Durante estos primeros años, hubo de armar un equipo y prepararlo para el proyecto de CRUZADA 27.
Material humano, “bien armados y entrenados”, e ir incluyendo sus soldados de apoyo y personal logístico.
Preparativos que estarán listos para mediados del 25.
Lo descubrí poquito después de la elección del 24.
El resultado electoral se reflejó en el cabildo 24/27. Material para reclutar.
Y luego… reciclar a través de su gabinete, personajes simbólicos, como Roberto Barraza, divisa tricolor en desuso; y Fernando Martínez, blasón desgastado de la masonería local, pero con reconocimiento nacional e internacional.
Y otro pequeño detalle…
La Asociación de autoridades locales de México A.C como avanzada logística y colecta de recursos, como parte de la mesnada.
Pensar en política bajo la enseñanza ancestral de la edad media y transportarla a nuestros tiempos resulta didáctico, pero increíblemente poderoso.
La mesnada era finalmente un atado de conveniencias mutuas.
Hoy le llaman ganar/ganar
Veamos.
Un caballero que formaba parte de la mesnada de un rey obtenía varias ganancias y beneficios.
Rentas y Beneficios: Los caballeros recibían una renta específica llamada “mesnadería” por su servicio.
Esta renta les permitía mantener sus armas y caballos en buen estado.
Prestigio y Honor: Ser parte de la mesnada del rey otorgaba un gran prestigio y honor.
Los caballeros eran vistos como protectores del reino y gozaban de una alta posición social.
Protección Real: Los caballeros de la mesnada contaban con la protección del rey, lo que les brindaba seguridad y respaldo en tiempos de conflicto.
Exenciones Fiscales: En algunos casos, los caballeros de la mesnada estaban exentos de pagar ciertos impuestos y tributos, lo que les permitía conservar más de sus ingresos.
Oportunidades de Ascenso: Servir en la mesnada del rey podía abrir puertas a mayores oportunidades dentro de la corte y el ejército, permitiendo a los caballeros ascender en rango y obtener más tierras y títulos.
Estos beneficios hacían que muchos caballeros buscaran formar parte de la mesnada del rey, ya que les proporcionaba tanto ventajas económicas como sociales.
¿Lo tienen?
Ahora transpórtenlo a nuestros días.
CARTAPACIO
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