Vladimir Putin se reunirá este jueves con el secretario general de la ONU, António Guterres, tras la cumbre de los BRICS que arrancó el día de hoy
El presidente ruso, Vladimir Putin mantendrá “siete reuniones bilaterales”, entre ellas con Guterres, tras el cierre de la reunión de potencias emergentes en esa ciudad situada a unos 700 kilómetros al este de Moscú.
Por ahora, no hay señal alguna de que Ucrania o Rusia estén dispuestas a entablar conversaciones para poner fin a este conflicto que se prolonga desde hace más de dos años y medio.
Rusia pretende demostrar como anfitriona de la cumbre de los BRICS, que se realizará desde hoy al jueves, el fracaso de la política de aislamiento de Rusia y de las sanciones que le impusieron las potencias occidentales por la intervención en Ucrania.
Casi tres años después de que la invasión rusa de Ucrania generara la condena de Moscú por parte de países de todo el mundo, el líder Vladimir Putin organiza una cumbre con más de una decena de líderes mundiales, en una clara señal del autócrata de que, lejos de estar solo, cuenta con el respaldo de una coalición emergente de países.
La cumbre de los BRICS, de tres días de duración, que comienza este martes en la ciudad de Kazan, en el suroeste de Rusia, es la primera reunión del grupo de las principales economías emergentes (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) desde que se amplió a principios de este año para incluir a Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Etiopía e Irán.
Se espera que asistan los líderes de estos países, como el chino Xi Jinping, el indio Narendra Modi, el iraní Masoud Pezeshkian, el sudafricano Cyril Ramaphosa, así como líderes de países que no están dentro del grupo, como el presidente turco Recep Tayyip Erdogan.
La reunión de Kazan también brinda a Putin la oportunidad de reunirse cara a cara con sus colegas líderes de los BRICS y otros dignatarios amistosos presentes.
La reciente inclusión en el BRICS de Irán ha proporcionado a Rusia cientos de aviones no tripulados y misiles balísticos de corto alcance situación que Irán niega acerca aún más a Moscú a un estrecho socio de Rusia. Estados Unidos y sus aliados también acusaron a China de impulsar el esfuerzo bélico de Rusia mediante el suministro de bienes de doble uso, como herramientas de maquinaria y microelectrónica, un papel que Beijing también niega al defender su “comercio normal” con Rusia y su “neutralidad” en la guerra.
Se espera que en los próximos días los líderes discutan cómo avanzar en los esfuerzos en curso para liquidar pagos fuera del sistema denominado en dólares estadounidenses utilizando las divisas y redes bancarias de los BRICS, un sistema que podría tener beneficios económicos, pero que también ayuda a países miembros como Rusia a eludir las sanciones occidentales. También es probable que los países busquen formas de impulsar la cooperación económica, tecnológica y financiera en toda una serie de ámbitos, desde la energía hasta el intercambio de datos por satélite.
Al mismo tiempo, sin embargo, tendrán que lidiar con las divisiones y las distintas agendas de los países del grupo, que, según los observadores, limitan los logros de los BRICS.
El grupo celebró su primera cumbre de Brasil, Rusia, India y China en 2009 como una convergencia de los principales mercados emergentes antes de ampliarse al año siguiente para incluir a Sudáfrica.
Unidos por un interés común en reformar el sistema internacional para garantizar que sus voces estuvieran mejor representadas, los BRICS incorporaron desde el principio a países con profundas diferencias en sus sistemas políticos y económicos, además de otras fricciones.
India y China, por ejemplo, mantienen desde hace tiempo un conflicto fronterizo, pero constituyen dos pilares fundamentales del club. Sus divisiones se acentuaron aún más en los últimos años, a medida que las relaciones entre China y Estados Unidos se han vuelto más tensas, mientras que India y Estados Unidos se han asociado más estrechamente.
En la actualidad, a pesar de que el BRICS ha vuelto a ampliarse y el Kremlin afirma que más de 30 países más están interesados en unirse a él o cooperar con él, la profundización de las fisuras geopolíticas complica aún más la identidad y la dirección del BRICS, afirman los observadores.
Putin mantendrá reuniones bilaterales con los mandatarios de India, China y al menos otros 13 países.