Un proyecto creado en 1972 para dar respuesta a la clase trabajadora de México y de esta manera responder a la Carta Magna. De esa fecha y al pasar de los sexenios de gobierno de nuestro país, finalizó ese noble proyecto en el deterioro para la clase trabajadora y un gran negocio para muchos políticos.
Una de las últimas pifias de este organismo en el sexenio pasado, fue robar junto con autoridades de diferentes niveles de gobierno, a sus derechohabientes, a la clase más desprotegida de este país, a la clase trabajadora. Desde tribunales del Estado de Nayarit, se crearon “cadalsos” para sacrificar a miles de derechohabientes y por medio de juicios inexistentes, despojarlos de su vivienda.
Afortunadamente los cambios de gobierno, en Nayarit, han dado cuenta de estos actos de corrupción y se está en proceso de llevar a la cárcel a magistrados, jueces y demás actores, vinculados en esta organización delictiva.
Por otro lado, dentro del nuevo gobierno federal, quienes están al frente de este organismo y recibieron la “papa caliente” del cúmulo de irregularidades en INFONAVIT. Buscan como desenmarañar este grave entuerto. Mientras son peras o manzanas, se han tomado cartas en el asunto, frenando en principio estas acciones fraudulentas y buscando la forma legal para reparar los daños a cientos de miles de afectados. Urge en INFONAVIT, buscar nuevos esquemas de cumplimiento a la Carta Magna. Mi pregunta, ¿Se podrá desde una manzana podrida enmendar estos vicios o urge tener otras alternativas de respuesta a la clase trabajadora?.
Agregó, quedarán impunes los delincuentes mayores de estos actos Alejandro Murat, hoy gobernador de Oaxaca y David Penchina. José Luis Rodríguez Chávez.
