El presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó al Gobierno que estudie la construcción de un puente para unir por carretera a Rusia y Corea del Norte, países que comparten apenas 20 kilómetros de frontera terrestre.
Este asunto fue abordado por Putin en su reunión (el pasado jueves) con el líder norcoreano (Kim Jong Un)”, informó hoy Yuri Trutnev, enviado presidencial para el Lejano Oriente ruso, según la agencia Tass.
Nada más concluir la cumbre ruso-norcoreana, Putin ordenó a Trutnev que estudiara el proyecto de un puente sobre el río Tumen, la frontera natural entre ambos países.
Actualmente, Rusia y Corea del Norte están unidos por el Puente de la Amistad, que admite sólo trenes y que fue utilizado por Kim para desplazarse la pasada semana a la ciudad rusa de Vladivostok para la cumbre con Putin.
Rusia también baraja otros proyectos como el tendido de una vía férrea, gasoductos, oleoductos y una red eléctrica intercoreana, aunque todos requieren el visto bueno de Corea del Sur.
La frontera, que incluye más de 20 kilómetros de línea fluvial y marítima, es la más pequeña entre Rusia y cualquier otro país.
Putin, que se reunía por vez primera con Kim, apoyó en Vladivostok la postura de Pyongyang de que Occidente le conceda garantías de seguridad para que renuncie a su arsenal nuclear.