BRADY Y MAHOMES ¡PREDESTINADOS!

Columna A TÍTULO PERSONAL

0
253

Sergio Arturo Duarte

Conecta Juárez

Atletas fuera de serie, predestinados al éxito, rodeados de fama y fortuna, los mariscales de campo Tom Brady y Patrick Mahomes estarán una vez más este domingo 7 en los controles de sus respectivos equipos en un duelo por el trofeo Vince Lombardi y todas las luces están puestos en ellos como los grandes protagonistas del Supertazón LX, entre los Bucaneros de Tampa Bay y los Jefes de Kansas City, en el cerrojazo de la temporada 20-21 en la NFL.

Si bien integran distintas generaciones de jugadores y la diferencia de edades entre ambos es de 18 años, (43 de Brady por 25 de Mahomes), su divisa, carta de presentación o moneda de cambio es simplemente el triunfo, aunado a su temperamento, talento, especial liderazgo y nervios de acero para afrontar la presión en momentos de adversidad.

Por ello, el partido por la corona es visto ya como un choque entre Brady, el actual rey de la liga con seis anillos en sus manos y su probable sucesor, Mahomes, quien ya tiene uno con los Jefes y busca el segundo consecutivo.

Originario de San Mateo, California, Brady admiró en su juventud a los 49ers de San Francisco y a Joe Montana, por lo que su deseo era ser elegido en el draft por los gambusinos.

Egresado de los Wolverines de Michigan, donde es el tercero en el ranking en la historia de la escuela con 442 pases completos de 710 intentos, Brady no fue tomado por los 49ers sino por los Patriotas de Nueva Inglaterra, hasta la sexta ronda.

Con los Pats salió de la banca y encumbró su carrera cuando suplió al mariscal lesionado Drew Bledsoe en la temporada 2001-2002 y llevó al título a Nueva Inglaterra sobre los Carneros de San Luis por score de 20-17, en el Super Bowl XXXVI.

Así, a los 24 años con 184 días se convirtió en ese momento, en el mariscal más joven en la historia de la NFL en ganar un cetro.

Entre polémicas por balones desinflados usados por Brady y el robo de señales de parte del entrenador Bill Belichik, a esta aparición en el choque por la corona de Brady se sumaron ocho más con los Pats.

Ganó las ediciones XXXVIII del gran juego a Carolina (32-29), XXXIX a Filadelfia (24-21), XLIX a Seattle (28-24), LI a los Halcones de Atlanta (34-28 en un gran regreso y en tiempo extra) y LIII a los Carneros de Los Ángeles (13-3), este último a los 41 años.

El californiano perdió en dos ocasiones ante los Gigantes de Nueva York 17-14 y 21-17, en los Super Bowls XLII y XLVII, al igual que ante Filadelfia por 41-33, en la edición LII.

A estos logros se suman un cúmulo de distinciones individuales, entre ellas, cuatro nominaciones como Jugador Más Valioso del Super Bowl (2002, 2004, 2015 y 2017), tres como el JMV de la NFL (2007, 2010 y 2017) y en dos ha sido el Jugador Ofensivo del año de la NFL (2007 y 2010).

Enfundado ahora con el jersey de los Bucaneros de Tampa Bay, Brady, quien nunca ha sido bueno para correr, pero tiene la onza en el brazo para cambiar el rumbo de un partido, lleva una alimentación especial y realiza más ejercicios de estiramiento que de peso, irá por su séptimo gallardete en su cuenta personal y trata de echar por tierra los comentarios de quienes lo consideran acabado.

De lograrlo, él solo tendrá más coronas que los Patriotas y Acereros que suman seis cada uno.

De salir con el triunfo, los Bucaneros serán el primer equipo en la historia de la NFL que se corona en casa, a la vez, tendrán dos trofeos en la vitrina sumado al que obtuvieron en 2003 sobre los Raiders de Oakland por 48-21.

Si la vida deportiva y personal de Brady es como entresacada de un cuento de hadas, Mahomes ‘El Niño de Oro’ encarna igualmente una fascinante historia.

Gracias a que acompañaba a su padre Pat Mahomes -un exlanzador de Grandes Ligas- a los juegos de beisbol, la joya de los Jefes de Kansas City creció entre figuras del deporte en los Estados Unidos como Derek Jeter y Alex Rodríguez.

Originario de Tyler, Texas, donde nació el 17 de septiembre de 1995, Mahomes II mostró pronto grandes dotes para jugar tres deportes: futbol americano, beisbol y basquetbol.

Se inclinó por el primero y el tiempo le dio la razón al habilidoso mariscal que corre muy bien el ovoide, saca un pase de la nada gracias a su excelente brazo y convierte una jugada rota en una productiva acción para su equipo.

Egresado de los Red Raiders de Texas Tech, Mahomes llegó a Kansas City y a la NFL en el décimo puesto de la primera ronda del draft de 2017.

Suplente en las laterales de Alex Smith por un año, Mahomes tomó la batuta del equipo como titular en la campaña 2018, su impacto fue inmediato, maravilló a propios y extraños, ‘quemó’ la liga con 50 anotaciones y 5 mil 097 yardas por pase y ganó la distinción de Jugador Más Valioso.

A la campaña siguiente lanzó 26 anotaciones, sufrió cinco intercepciones, sumó 4 mil 031 yardas y saboreó la gloria al ganar el Supertazón LIV sobre San Francisco por 31 puntos a 24.

Tras la remontada sobre San Francisco fue elegido el Jugador Más Valioso del juego e inscribió su nombre como el segundo mariscal más joven en ganar un Super Bowl con 24 años y 138 días, sólo atrás de Ben Roethlisberger, quien lo hizo con 23 años y 320 días y por encima de Brady (24 años y 184 dias), su rival de este domingo.

Casado con su novia de la secundaria Brittany Matthews, con quien espera un hijo, Mahomes vivió un 2020 de ensueño, en julio pasado firmó una extensión de contrato récord con los Jefes por 10 años y 477 millones de dólares garantizados con varias clausulas.

Este es el acuerdo más lucrativo en la historia del deporte profesional, que superó el de 426.5 millones de dólares que firmó Mike Trout con los Angelinos de Los Ángeles.

A sus 25 años y con un enorme futuro en los emparrillados, Mahomes irá por su segundo trofeo Vince Lombardi en su trayectoria en apenas su cuarta temporada en la NFL y tratará de hacer buenos los pronósticos que marcan a los Jefes como favoritos por tres puntos.

Elija su favorito. Me quedo con Tampa Bay y la experiencia de Brady sobre la magia y juventud de Mahomes, en un partido que en el papel luce muy cerrado.