En los últimos días las sopas instantáneas ganaron notoriedad, pues la Profeco decidió retirar algunos de estos productos del anaquel, debido a incumplimientos en el etiquetado y por publicidad engañosa.
Aunque estas sopas tienen alto contenido de sal, calorías y envases que al calentarse en el microondas pueden ser dañinos para la salud, el consumo de estas sopas va en aumento y las compañías que las producen buscan innovar con opciones más premium.
Un estudio de Research and Markets reveló que el mercado global de sopas instantáneas seguirá creciendo. En 2020 el valor del mercado de los fideos instantáneos se estimó en 28 mil 400 millones de dólares a nivel mundial; para 2027 se espera que supere los 32 mil 100 millones de dólares.
Según el documento, este avance se deberá, en gran medida, a que las compañías fabricantes están cambiando a opciones premium conforme el mercado de sopas de menor precio se satura.
Entre las marcas con mayor posicionamiento entre los consumidores mexicanos está Maruchan, ante el aviso de la Profeco, los consumidores inmediatamente fueron a sus redes sociales para lamentar el hecho y solicitar más información, aunque, hasta el momento, no han tenido respuesta por parte de la firma.
En tanto, Nissin, respondió a un usuario de Facebook que “siempre vale la pena tener un buen surtido en casa. Pero no te preocupes, nosotros llegamos para quedarnos, ya es oficial que nos seguirás topando en tu tienda más cercana”.
Asimismo, la marca sostuvo que sus productos están hechos en México y que cumplen al 100% con la ley y normas de etiquetado.
Las compras de pánico
Tras el anuncio de la Profeco, los consumidores salieron a buscar el producto, mientras en redes sociales los usuarios publicaron fotos de los anaqueles vacíos.
Frente a las compras de este tipo, Paulina Magaña, investigadora de salud alimentaria en El Poder del Consumidor, mencionó que pudo haber pasado algo muy similar a lo que ocurrió cuando se prohibió el uso de personajes en los cereales.
“Ese tipo de compras son un reflejo del alto consumo, si fuera un producto poco consumido el asunto pasaría desapercibido. Reafirma el alto consumo que hay en el país, el vínculo que generan los productos ultra procesados, esto podría ser efecto de la publicidad, que hace que reconozcamos los productos y los consumamos, pese a lo que contienen”, dijo.
¿Más baratas? No tanto
Aunque las sopas instantáneas se han popularizado por su bajo costo y practicidad, la realidad es que no son más baratas que las opciones hechas en casa, inclusive un kilo de esta sopa puede ser 338% más cara que un kilo de frijoles.
Magaña expuso que comprar un kilo de frijol resulta mucho más económico que comprar un kilo de sopa instantánea.
De acuerdo con la Revista del Consumidor, donde se publicó la investigación sobre la calidad de sopas instantáneas, el precio de la sopa Maruchan Instant Lunch es de 11 pesos por envase; con base en un sondeo efectuado por Excélsior, dicho envase contiene 64 gramos de producto, por lo cual, para comprar un kilo de sopa se requieren 15.6 envases y 171 pesos. En tanto, un kilo de frijol negro vale 39 pesos en tiendas de autoservicio.
Los datos:
Profeco retiró 129 mil 937 unidades de sopas instantáneas el viernes pasado, de tiendas de autoservicio y establecimientos comerciales.
El total de unidades con inmovilización corresponden a 12 productos.
Marcas con incumplimientos
Knorr Pasta Lista.
Myojo.
Selecto Brand.
J-Basket.
Chikara Udon.
Buldak Cheese.
Ottogi Ramyon.
Kraft.
Sapporo y Maruchan, aunque no se encontró el producto que se buscaba retirar.
Nissin no está en la lista de Profeco, ya que sí cumplió con la Nom.