De primer ministro a columnista

La carrera de Boris Johnson comenzó en el periodismo antes de convertirse en el jefe del gobierno británico; renunció como legislador la semana pasada.

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El ex primer ministro británico, Boris Johnson, se convertirá en el nuevo columnista del periódico Daily Mail, marcando su regreso a una carrera periodística en la que ha escrito para varios de los principales medios británicos y ha experimentado controversias, incluso siendo despedido por inventar una cita.

A sus 58 años, Johnson renunció la semana pasada como legislador después de una investigación que lo declaró culpable de engañar deliberadamente al Parlamento sobre las fiestas celebradas durante el confinamiento por el covid-19, el caso Partygate. Según informó el diario, Johnson escribirá para el Daily Mail todos los sábados.

El periódico comentó: “Ya seas fan de Boris o no, será una lectura obligada tanto en Westminster como para millones de personas en todo el mundo”. Desde su dimisión como primer ministro el año pasado, Johnson, uno de los políticos británicos más conocidos y controvertidos, ha obtenido ganancias millonarias con sus conferencias y giras.

Se espera que su regreso al periodismo sea un nuevo trabajo lucrativo y le brinde un medio en uno de los periódicos de derechas más leídos del Reino Unido para expresar sus opiniones sobre el gobierno y el primer ministro, Rishi Sunak. Johnson dimitió como legislador tras un sonado ataque a una comisión parlamentaria que dictaminó que engañó deliberadamente al Parlamento con sus declaraciones sobre las fiestas incumpliendo las normas. El lunes, el Parlamento decidirá si aprueba las conclusiones de la comisión.

No es la primera vez que Johnson se enfrenta a escándalos. Comenzó su carrera laboral en el periodismo, pero fue despedido del diario The Times por inventarse una cita. Luego, encontró éxito en el Daily Telegraph, donde, como corresponsal en Bruselas, criticó vigorosamente a la Unión Europea con un estilo de escritura vívido pero no siempre preciso.

Después, combinó su carrera en los medios con la política, siendo editor de la revista Spectator y diputado. Antes de convertirse en primer ministro, escribía una columna regular para The Telegraph, en la cual a menudo fue criticado por sus opiniones, como cuando hizo comentarios islamófobos al comparar a las mujeres musulmanas que llevaban burka con buzones o atracadoras de bancos.