DESLINDES DEL CAPITÁN CENTINELA

Columna CARTAPACIO Por Raúl Ruiz

0
67

De la nada, la RAM, saltó sobre la carpeta asfáltica de la carretera, Juárez/Chihuahua.

A la altura de, El Sueco, comenzó a perseguir al tráiler, y Víctor G., el chofer, pisó el acelerador.

– ¡Párate cabrón! Le gritó el asesino, al tiempo que la RAM se le emparejaba.

Cuatro encapuchados vestidos de negro, con armas largas, resaltaban desde el interior de la pick up blanca, sin placas.

Imposible pasar inadvertidos.

Al ver que Víctor no obedecía la instrucción de detenerse, le dispararon directamente.

Herido, alcanzó a orillarse, frenar y abrir la portezuela, para caer inconsciente.

Los malandros no alcanzaron a consumar el asalto, automovilistas y tráileres, que viajaban en la misma dirección se detuvieron a prestarle ayuda al herido y lo trasladaron a un hospital de Chihuahua donde lo atendieron, pero, por la gravedad de sus heridas, horas después, perdía la vida.

Paradojicamente, al momento del ataque, líderes del transporte de carga, sostenían una conversación, con autoridades del gobierno. Exigían más seguridad para su gremio en las carreteras del Estado.

Los asaltos a transportistas eran ya una tendencia sin control.

Tamaulipas, Edomex, y ahora Chihuahua, han sido blanco de los “trabajos”, del crimen organizado. Sin que hayan podido controlarlos, hasta el momento.

Los tráileres en la carretera comenzaron a movilizarse. A la altura del Kilómetro 170, bloquearon el acceso.

– ¡Que no pase nadie!, ni de ida, ni de regreso.

Ordenó uno de los camioneros, visiblemente indignado.

¡De aquí no nos movemos hasta que detengan a esos asesinos! Arengó.

Rápidamente comenzó a acumularse el número de vehículos varados cerca de la caseta, Sacramento.

Al final, se calcula que fueron al menos, 25 kilómetros de vehículos inmovilizados durante más de 18 horas de tensión, originadas por el incidente.

En esta operación de bloqueo, cabe decir que nunca hubo presencia de uniformados de la seguridad pública estatal, o la guardia nacional. Ni siquiera de los boy scouts, o el ejército de salvación.

Bueno, ni siquiera un representante del gobierno que intentara concertar con los enfurecidos transportistas.

Cero en capacidad negociadora.

Al preguntarle directamente sobre su responsabilidad de entregar seguridad a los chihuahuenses, el Capitán Centinela, respondió como Vicente Fox… ¡y yo por qué!

Bajo un infantil juego de TIRA Y AFLOJA, el gobierno del Estado, se deslinda de la seguridad de los chihuahuenses.

– Ya deje de hacerse el pendejo, señor presidente. Le mandó decir, LA COMISIONADA EN JEFE, de las fuerzas de seguridad en el estado, al primer mandatario, dejando pasar incidentes sangrientos cometidos en su territorio.

El asesinato de Víctor Trailero, en la carretera, era un evento violento más que soslaya la Comisionada, y su inútil Capitán Centinela.

Para los efectos prácticos, la presunción de un sistema de seguridad denominado PLATAFORMA CENTINELA, con un costo de 4,800 millones de pesos, donde supuestamente se cuenta con 4 mil cámaras de seguridad, drones, micrófonos de larga audición, tanques de guerra, submarinos y armas de gas letal, no sirven para nada.

Pasar una noche en el auto, cualquiera lo puede resistir.

Pero pasarla bajo temperaturas congelantes, y vientos gélidos, está k-brown.

Martín K, quedó atrapado igual que cientos de automovilistas.

Las primeras horas fueron pasaderas, el intercambio de información entre los atorados los mantuvo entretenidos.

El contacto vía celular tranquilizaba a familiares y amigos, pero la desesperación comenzaba a causar sus estragos conforme caía la noche y bajaba la temperatura.

Cuántas historias de frustración y rencor, quedan en el anonimato, mientras se resuelve el conflicto.

Martín K, cenó una bolsa de papas, un gansito y un refresco de toronja. Pensó que la contingencia duraría dos horas a lo mucho, y ahí estaba, metido en su auto a la mitad de la noche titiritando de frío, hambriento y maldiciendo al gobierno de los tres niveles.

A la mañana siguiente, en un desayuno coloquial, analistas políticos evaluaban la situación.

– ¡La comisionada está arreglada con los malos!

Dijo uno de los analistas.

– ¿En que fundas esta afirmación? Preguntó el suspicaz.

– Es muy extraño que pese a la situación de caos vial, no haya habido un sólo policía o agente de tránsito tratando de darle fluidez al tráfico. Vamos, ni siquiera para redactar un parte situacional.

La comunicación oficial, muda. Toda la información era dada por los medios o los columnistas independientes.

Silencio sepulcral. Yo pensé que podrían estar fabricando un chico expiatorio para saciar la sed de sangre de los camioneros.

Pero obviamente los atracadores no estuvieron de acuerdo en sacrificar una de sus piezas y así dejaron correr la noche.

Luego, casi al medio día, con el rostro de hija buena, suplica a los camioneros desvelados y hambrientos, que permitan el fluido vehícular bajo promesa de perseguir a los malandros sin tregua ni compasión.

– Ándale ¿sí papi?, Ándale di que sí…. ¿sí?

Esta escena es pura especulación. Sólo para especuleros.

Pues mientras se lograba una concertación, Martín K, y una veintena de conductores ya agotados por la espera y falta de alimento, bajaron por la vereda de terracería, paralela a la línea asfáltica.

Aquí algunas líneas que compartió vía WhatsApp con un compañero periodista:

-“20 minutos para salir a carretera y sigue todo bloqueado. Solo un carril libre por donde estamos avanzando sentido a Juárez.”

“No hay salida, de nuevo a terracería”.

” Se tuvieron que romper cercos para poder avanzar. En todo este trayecto ni en la carretera he visto un solo policía. NADA. Es indignante.”

“Recién salimos a la carretera. Se ven libres 2 carriles. KM 41”.

“Y recién veo la primer patrulla de la guardia nacional y ya no hay trailers. Carretera despejada. Nos tomó 10 horas cruzar el bloqueo.”

En cuanto se abrió la carretera, se pronunció el empresariado juarense.

” … hacemos un llamado enérgico al Estado y a la Federación, para que se brinde seguridad a quienes diariamente utilizan los tramos carreteros, para traslado comercial-industrial y vacacional.”

Isela Molina, presidente de Canacintra.

“El nivel empresarial aquí debe estar jugando un papel muy importante; porque ya es un hartazgo en todos los sentidos toda esta cuestión de violencia que está pasando.

Ahorita son en las carreteras, pero por ejemplo aquí en ciudad Juárez pues ya sabemos que tenemos un problema muy fuerte de violencia y no lo resuelven.”

Thor Salayandia

VP de Fronteras y Maquiladoras de CANACINTRA.

“La situación es muy difícil, porque tienen razón, pero nuestros gobiernos no quieren o no pueden contener la delincuencia y luego no dan la cara, estos transportistas no se van a quitar y las pérdidas van a ser millonarias”.

Manuel Sotelo

Líder de los transportistas

Y el Consejo Coordinador Empresarial, en su tradicional posición hacia el gobierno estatal, en decúbito prono… “Exigimos determinantemente al gobierno federal que cumpla su responsabilidad… y respaldamos al gobierno del estado en…”

Esta historieta continuará…

CARTAPACIO

Conectajuarez no se hace responsable de los puntos de opinión de los columnistas que participan en este medio de comunicación, es responsabilidad única de quien lo escribe, el autor sostiene cada uno de sus argumentos.