Hay tantos temas para desarrollar. Mucha diversidad en nuestro planeta, país, estado, ciudad.
Ahora escribiré sobre la sociedad. Una sociedad con infinidad de complejos, frustraciones y más yerbas. Nunca nos entenderemos. Por un lado, cristianos, budistas, musulmanes, católicos, etc. Todos dicen tener la razón y que su religión es la… única, la verdadera.
Negros, blancos, amarillos y el racismo en su máxima expresión.
Guerras por el fanatismo religioso. Brutales homicidios abanderados por las religiones, por la “fe”. Pueblos que sufren ante los embates de estas desgarradoras brutalidades.
¡¡Todo en nombre del Dios de cada religión!!
Desde que existe el hombre en la tierra, ha luchado contra la injusticia, el abuso, la arbitrariedad, la indiferencia del mismo hombre.
Es difícil entender a la humanidad. Más bien imposible. Cada uno de los 7 mil 700 millones de habitantes del globo terráqueo, creen tener la verdad absoluta. Por tanto, es difícil, por no decir imposible ponernos de acuerdo.
Gobiernos que nunca dan, ni darán satisfacción a sus gobernados. Y gobernados que nunca estarán conformes con nada.
Como sociedad hemos evolucionado en tecnología, pero des evolucionado en principios y valores.
Los pueblos se encuentran nómadas en sus inquietudes, atomizado en sus ideales, no saben a dónde ir y temen al cambio de paradigmas.
Antes de Cristo y después de Cristo, la historia es la misma. Desconozco porque de esas conductas humanas. Seguramente nunca las entenderemos.
Por un lado, la riqueza mayúscula, por no decir infinita. En el otro extremo la pobreza, que mata millones de seres en el mundo.
Finalmente creo que es mejor disimular todo esto, como la mayor parte de la población lo hace y dejarnos de inquietudes indescifrables.
José Luis Rodríguez Chávez.